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El Camino de Santiago o cómo formatear el disco duro

Seguro que todos habéis pasado por ese momento en el que vuestro ordenador tiene tanta mierda acumulada que ya no hay forma humana de lograr que funcione correctamente. Por mucho que le pases veinte antivirus, cierres y vuelvas a abrir todos los programas, cambies a otro navegador diferente o lo resetees una y mil veces... Llegado ese momento solo queda una solución posible: formatear el disco duro.

Así estaba yo antes de partir rumbo hacia Santiago de Compostela. Tan petado que nada de lo que hacía servía para lograr que el ordenador volviera a funcionar como debía. Tal vez lo conseguía a ratos pero, al final, el sistema volvía a quedarse colgado. Así que no tuve más remedio que tratar de formatearlo. Y creo que lo he conseguido. No sé si es porque desconectas absolutamente de todo, por las horas y horas de reflexión durante las interminables caminatas o, simplemente, porque el cansancio te vacía por dentro. En principio puede parecer un coñazo, la cosa lleva su tiempo, hay que volver a reinstalar todo y nada te garantiza que en solo unas pocas semanas vuelvas a estar en las mismas. Pero merece la pena intentarlo.  

Tampoco nos equivoquemos. Por mucho que borres toda la información, es imposible que ciertas cosas cambien. Por ejemplo, el sistema operativo va a seguir siendo siempre el mismo, tampoco te vas a poder librar del Explorer o del Reproductor de Windows Media, que te van a seguir persiguiendo durante el resto de tus días. Pero al menos te has quitado todos los virus de encima, puedes instalar programas mejores o, al menos, más útiles, y no volver a utilizar todos aquellos que eran totalmente inservibles pero que tenías por ahí guardados desde tiempos inmemoriales. Es decir, no puedes empezar totalmente de cero porque el maldito Bill Gates lo tiene todo muy bien atado, pero sí que puedes volver a configurar tu ordena un poco a tu antojo. Ya le conoces mejor, sabes de qué pie cojea, qué programas le vienen bien y cuáles son una auténtica basura que no quieres volver a ver ni en pintura.  

El caso es que cuando vuelves a encenderlo, durante unos momentos mágicos, todo vuelve a funcionar de maravilla. Las páginas se cargan en apenas unas décimas de segundo y sientes un cosquilleo de felicidad. Aunque luego queda lo más difícil: mantenerlo limpio y plenamente operativo el mayor tiempo posible. Esperemos que sea así.

El gran timo de los datos del paro del mes de junio

Se respira cierta euforia en el ambiente por los datos del paro del mes de junio. Euforia que no acabo de entender muy bien. O la gente es muy simple o resulta muy fácil engañarla. Vale, muy bien, el paro ha bajado en 127.000 personas, el mayor descenso de la Historia en un mes de junio. Pero la cuestión es que solo se han creado 28.000 nuevos contratos. ¿Qué significa eso? ¿Qué pasa con ese descuadre de 100.000 personas? Pues que, simplemente, aunque no han encontrado trabajo, no se han apuntado a las listas del INEM. En la mayoría de los casos porque, o bien se han visto obligados a emigrar ante la imposibilidad de encontrar aquí un empleo digno, o bien porque al acabar su contrato ni les merece la pena apuntarse al paro porque no les corresponde prestación por desempleo y porque las posibilidades de que el INEM te ayude a encontrar trabajo son nulas (al menos eso es lo que me dijeron a mí en la oficina, así que ganas son de perder una mañana). ¿Quiere decir eso que no quieren trabajar? No, sencillamente quiere decir que han perdido toda esperanza de hacerlo en este país. Y menos aún con la asistencia del INEM.

Además, hay que tener muy en cuenta que estamos en pleno verano y en uno de los países más turísticos del mundo. Que los hosteleros se han visto obligados a bajar los precios para atraer clientes, con lo que el turismo ha crecido este año con respecto al anterior. Si aún así no bajara el número de desemplados la cosa sería ya de traca.

Pero me gustaría hablar, sobre todo, de lo de la creación de tan solo 28.000 nuevos empleos. Y es que lo realmente importante para la economía de un país es su fuerza productiva, es decir, el número de personas que trabajan. Me explico, ¿sería bueno que, en un país como España, de 45 millones de habitantes, solo 15 quisieran trabajar? Vale, en ese caso todas no habría tantos millones de personas no apuntadas al INEM... ¿y qué? El paro sería muy bajo, pero el problema muy grave pues habría 30 millones de personas dependientes de solo 15 trabajando. Hacia ahí nos dirigimos de cabeza. Hacia un modelo en el que solo unos pocos podrán tener un trabajo digno y estable y el resto ni se molestará en perder el tiempo en buscar algo completamente utópico. Irán tirando como buenamente pueda, con minijobs o con pequeñas chapuzas cobradas en negro.

Recuerdo los tiempos de las vacas gordas. Cuando el paro bajaba en 150.000 personas pero se creaban 180.000 puestos de trabajo. Es decir, se creaba trabajo para 150.000 personas que ya lo buscaban en España y, además, para otras 30.000 que venían de fuera a buscarlo. Ahora somos nosotros los que tenemos que largarnos porque aquí, en plena temporada estival, solo se crean 28.000 miserables puestos de trabajo. Y ni siquiera voy a entrar a valorar las condiciones de estos. El que quiera saberlo que se acerque a cualquier chiringuito de playa y pregunte a los camareros.

Y sin embargo, Gobierno y medios de comunicación afines están que se tiran de los pelos de la felicidad. Que fácil resulta controlar el rebaño. Sobre todo, cuando este ya ha perdido toda esperanza.

Crónica del año más extraño de mi vida

Antes de empezar a leer este post has de saber que está dedicado exclusivamente a aquellos que me quieren o que tienen algún tipo de interés por mi vida. Así que, si no es el caso, creo que lo mejor que podrías hacer es pinchar en la crucecita situada en la parte superior derecha de la pantalla y seguir a otra cosa. Tampoco deberías seguir leyendo si no te gustan demasiado las reflexiones filosóficas o si, simplemente, no te apetece leer ralladas mentales. Avisado estás, así que lo que hagas a partir de ahora será bajo tu entera responsabilidad.

Bien, como todos sabéis, mis años no siguen el calendario romano sino que comienzan y acaban con el curso escolar. Así que, una vez finalizado este, creo que ha llegado la hora de pasar revista y de hacer recuento de daños. "Podrías hacerlo en la intimidad de tus pensamientos y no en un foro público como este", pensaréis algunos. Cierto. En ese caso tampoco sigas leyendo.

¿Ya? ¿Estamos solo los que tenemos que estar? Bien, entonces paso a explicar que si escribo esto aquí es, en primer lugar, porque va con mi naturaleza bocazas y, en segundo, porque en cierto modo necesito desahogarme.

Y tampoco es que se pueda decir que haya sido un año malo. De hecho no ha sido ni malo ni bueno y, al mismo tiempo, las dos cosas a la vez. Lo que sí ha sido, sin ningún tipo de duda, es el año más extraño de toda mi vida. Y mira que muchos sabeis que los he tenido de todas las formas y colores.

La cosa comenzó pintando muy bien. Un año semisabático dedicado en exclusiva a dar unas pocas clases particulares para cubrir mis gastos, sacarme el Advanced de inglés, escribir mi novela, hacer mucho deporte... y bueno, si tenía que venir algo más, pues que simplemente llegara. Ante todo tranquilidad, relax y disfrutar de la vida. Y así fue durante unos meses en los que todo me salió a pedir de boca. Incluso mejor aún de lo planeado. Parecía que las estrellas y los planetas se habían alineado para que todo saliera genial. Pero todo aquello, por diversas circunstancias, acabó de forma abrupta. En principio no debería haber sido algo especialmente traumático. Pero en ese momento me di cuenta de que no había sabido saborearlo plenamente. Suele pasar, sí. Lo malo es que te despiertas del sueño y comienzas a ser consciente de que ya se ha acabado, que no puedes volver a disfrutar de él. Y ahí, amigo, estás jodido. 

A partir de entonces empezó mi invierno particular. Un invierno duro, frío, lluvioso y solitario... Y largo. Jodidamente largo. Probablemente el más largo de mi vida. Al menos a mi se me hizo eterno. Pero tampoco me voy a extender mucho en el tema. Los pocos que sabeis cómo lo pasé ya teneis toda la información necesaria. Y los que no... pues bueno, lo importante es que ya se terminó.

Y en esas llegó la primavera. Esos primeros días de sol y calorcito y, muy poquito a poco, me fui viniendo arriba. Sacando la cabecita de la madriguera en la que había estado hibernando y rumiando mis infiernos personales. Retomé la bici, empecé a salir de nuevo y a rehacer lo que hasta hace poco estaba totalmente deshecho. Pero con la primavera también llegaron los vaivenes. Y qué vaivenes señores. Un día estaba aquí, feliz y sorprendido de algunas cosas que pasaban y que me alegraban la vida, y al día siguiente allá, desesperanzado, triste, estresado y, sobre todo, pérdido.

Y así estoy ahora. Queriendo estabilizar mi vida y viendo que es totalmente imposible. Que la cosa está jodidamente complicada. Y que, por si fuera poco, parece que algo o alguien se empeña en utilizarme como la bolita de una ruleta de casino.

Pero, como ya he dicho, no creo que pueda considerar este como un año malo porque, aunque ha habido épocas duras, también he vivido momentos maravillosos. Lo tomaré como un año en el que, ante todo, he aprendido, he madurado y he aprendido a ser consciente (más aún) de lo afortunado que soy en muchísimos aspectos. Además, he conocido a bastantes personas interesantes. Unas han permanecido en mi vida varios meses, otras solo unas pocas semanas, unas cuantas apenas un día y alguna otra espero que continúe más o menos cerca de mi durante el resto de mi vida.

Y es que, al final, te acabas dando cuenta de que todo esto solo merece la pena por teneros a vosotros ahí, a los que habéis leído toda esta mierda hasta el final, a los que, en cuanto habéis detectado mis momentos de bajón, habéis acudido prestos a interesaros por mi y a levantarme el ánimo. Porque si no fuera por vosotros seguramente ahora estaría hundido. Porque ya sabéis que yo necesito muy poquito para ser feliz... que me quieran y que me lo demuestren :)

¡¡Feliz prospero año nuevo 2013/2014!!